Cuando, finalmente, te decides a dar “ese” paso que llevas tanto tiempo postergando y te llenas de valor para elegir el camino que quieres andar, comienzas a experimentar un montón de emociones que lejos de “animarte”, te debilitan invadiendo de vez en cuando tu energía y tus ganas…
Salir de lo mismo de siempre y atreverse a cambiar cualquier aspecto de nuestras vidas, implica valor, decisión, coraje y perseverancia.
La confusión, las preocupaciones y los miedos aparecen intentando que te quedes donde estas y empiezas a escuchar esa vocecita que te dice: – “¿a dónde crees que vas?”- “eso es muy difícil”- “no lo conseguirás”
Es fácil caer en la tentación… a veces el camino se presenta demasiado oscuro y no es tarea sencilla mantener la fe, esa certeza inquebrantable que intuye que más allá de la confusión y la incertidumbre existe un mundo de posibilidades infinitas… una nueva etapa que elevará tu energía a la frecuencia donde los sueños comienzan a manifestarse.
Tanto si estás por “dar ese paso”, estas solo pensando en ello, o ya lo has dado, ten presente estas recomendaciones:
1- Vigila siempre tus pensamientos. Recuerda que son energía que se expanden por ondas de vibración
-Si piensas en negativo estarás enfocando en lo que te falta, es posible que comiences a dudar de tus propias capacidades, aparecerán el desgano y los miedos, y muy probablemente te conformes buscando justificaciones y excusas para no sentirte mal contigo misma y te convenzas de que es mejor quedarte en el lugar en el que estas.
Si tus pensamientos son positivos: elevarás tus vibraciones, te mantendrás enfocada y empoderada. Día tras día alimentarás tu fe, la convicción absoluta de que aunque ahora no lo veas, “eso que quieres” pasará. Te sentirás con ganas, motivada, conectada a tu intención poderosa de seguir hacia adelante.
La diferencia entre un pensamiento y otro, son los resultados que obtendrás en tu vida.
2- Es preciso que cambies tu forma de comprender e interpretar lo que te pasa. ¿Por qué? Imagina que tienes una caja, dentro hay manzanas pero tu deseas encontrar una pera. Podrías buscar eternamente que jamás la encontrarías. Si deseas manzanas, perfecto! tienes la caja adecuada. Pero si lo que deseas es peras, tienes que cambiar de caja, una que contenga peras. Cambia la forma en que percibes y entiendes tu vida… y todo comenzará a cambiar.
3- Hay días “raros” “grises” “apagados”. ¿Y? Abrázalos… forman parte de la vida. Deja de luchar y resistir. Abre tus brazos con lo bueno y lo malo, lo fácil y lo difícil., pero siempre con la intención de trabajar en tu bienestar y caminar hacia lo que quieres.
4- si no te sientes bien, significa que te has alejado de la ruta de tu felicidad, plenitud y paz interior. Detente, reflexiona, respira profundamente, y vuelve.
5- NO esperes que resuelvan tus problemas. Cuando hablo de problemas me refiero a “esas resistencias y trabas internas”… a “eso” que muchas veces no tiene ni nombre pero que no nos permite disfrutar de los resultados que deseamos… Si algo así te sucede: Pregúntate ¿que puedo hacer para solucionar esto? Siempre hay algo que podamos hacer: Resuelve y continúa.
6- No te metas miedo. Elige siempre desde el amor y todo saldrá bien.
7- Deja de contarte historias viejas, por favor, cualquier cambio precisa tiempo, lo único que podemos hacer es allanar el camino con una mente en calma y confiar. Eres maravillosa, tienes un potencial increíble. Despierta. Disfruta de cada instante de tu vida.
La diferencia entre quienes lo consiguen y quienes no lo hacen, es que a pesar de lo duro que todo se pone a veces, continúan hacia adelante.
Con cariño,
Natalia
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