“Si con lo que tienes no eres feliz, con todo lo que te falta tampoco lo serás” Erich Fromm.
El apego surge cuando nos identificamos y aferramos a alguien porque creemos que “ese alguien nos aporta felicidad y creemos que sin esa persona seremos infelices”,
Nos aferramos a las cosas porque creemos que el tener más, nos da satisfacción y felicidad.
También aparece cuando nos aferramos a una idea, pensamiento o historia para justificar nuestra actitud, estancarnos en nuestras zonas de confort y adoptar una actitud de víctimas, obvio, sin quererlo conscientemente (o sí?), lo cierto es que sea de una forma o de otra, el apego es un camino de sufrimiento.
En el siguiente vídeo, te cuento más sobre el apego, un ejercicio muy potente para empezar a cultivar el desapego y una llamada para conectar con tu verdadera esencia
Miles de Bendiciones,
Natalia